Entrevista con Sebastián Nowenstein, presidente de Ateos Sevillanos al Rescate de la Virgen de la Macarena (ASRVM)

« La Virgen acudió a nosotros, ateos, porque estaba hasta las narices de la indiferencia de los dirigentes de la Hermandad de la Macarena ».

« (…) la cruz del Valle de los Caídos es una mierda -una gran verdad esta, por más que Carrero Blanco se suba por las paredes cuando la oye- (…). »

Señor Nowenstein, ¿Cuál es la razón de ser de su asociación?

Que se saque a la Virgen de la Macarena del sitio en el que está. La Virgen se lo pidió a Esteban Nierenstein.

Pero ustedes son ateos…

La Virgen acudió a nosotros a través de Esteban Nierenstein porque estaba hasta las narices de la indiferencia de los dirigentes de la Hermandad de la Macarena. Tienen ellos montado un tinglado mercantilo-espiritual tan gordo que son incapaces de ver lo evidente: el calvario que sufre, día tras día, esa pobre mujer por tener que pasarse la vida encerrada con el bien llamado carnicero de Sevilla, que, para más inri es Hermano Mayor Honorario de la Cofradía…

¿El calvario de la Virgen, ejem, vendría a ser por « vivir » en el sitio donde está enterrado Queipo del Llano?

Mire, figúrese usted que debajo de la camilla de su casa, o en el suelo del comedor, tiene los huesos de uno de los peores criminales de la historia española ¿Le resultaría agradable?

Pero, la Virgen no…

Figúrese usted que, además, el criminal se levanta todas las noches y recorre su piso reclamando a gritos asesinatos, violaciones y dinero para pagarle a usted una casa…

Pero, señor Nowenstein, es que la Virgen no es…, ¡no es una persona!

Perdone usted, señora, pero ¿he que recordarle que España es un estado de derecho? Supongo que no tiene usted dudas al respecto… ¿O sí las tiene?

No, no, claro que no. Todos sabemos que España es un estado de derecho. Pero, don Sebastián, ¿qué tiene que ver el estado de derecho, con…, con la Virgen de la Macarena?

Señora, su mismo diario acaba de publicar un artículo que explica que tanto el Tribunal Constitucional como el Tribunal Supremo han desestimado la acción judicial de Europa Laica, que había acudido a la Justicia para que la Virgen Santísima del Amor devolviera la Medalla de Oro al Mérito Policial que le fuera otorgada por el ministro del interior, don José Fernández Díaz. Europa Laica había argüido que, no siendo la Virgen Santísima del Amor persona, darle una medalla era una decisión irracional y arbitraria. Nuestras más altas jurisdicciones no lo han entendido de ese modo. Las decisiones de la justicia española se imponen a todos los ciudadanos: la Virgen del Santísimo Amor es, pues, persona. Y, siéndolo ella, lo son todas las vírgenes, que son advocaciones de la misma persona, la Virgen María.

Ah…

El ministro, aprobado por nuestra Justicia, quería recompensar a la Virgen por el « manto de protección » con el que cubre a las fuerzas de policía… ¿Puedo serle franco, señora?

Sí, sí, por favor…

A mí me parece que es una gran hipocresía agradecer con una medallas y discursos el manto de protección de la virgen y después, dejarla a la pobre a solas y encerrada con un monstruo como Queipo, por más muerto que esté el Hermano Mayor Honorario ¿Por qué no interviene el ministro, ahora, que la Virgen lo necesita? Sólo Dios sabe lo que ha de pasar ahí dentro, en esa basílica oscura… Nuestra asociación, la hemos creado para denunciar esta situación y ponerle término.

Ya…, y han decidido instalarse en Bruselas…

Mire usted, la justicia española se muestra muy quisquillosa en estos momentos en la defensa de los símbolos del franquismo. Si nosotros queremos salvar a la Virgen, no nos podemos pasar el día en los juzgados. Hoy en día, en España, alcanza con decir que la cruz del Valle de los Caídos es una mierda -una gran verdad esta, por más que Carrero Blanco se suba por las paredes cuando la oye- para terminar ante un juzgado.

Muchas gracias, don Sebastián.

Gracias a usted, señora.