« Suficiente » e « interesante ». ¿De qué información debe disponer el pueblo español? Carta a la portavoz Montero.

Lille, Francia, 25 de febrero de 2021.

Señora potavoz del gobierno,

Soy docente en Francia y preparo un taller de escritura sobre la fabricación de la ignorancia, que es el campo de investigación de la llamada agnatología. Esta disciplina reciente estudia de los actos destinados a promover el desconocimiento de hechos demostrados científicamente o a dificultar el establecimiento de los mismos. En el taller que preparo, los alumnos escribirán textos libremente inspirados de situaciones en que se fabrica la ignorancia o se defiende su prevalencia. Los textos se basarán en dossiers que se comunicarán a los alumnos. Se concibe este proyecto de manera internacional, buscándose cruzar miradas ajenas o nuevas sobre procesos de fabricación de la ignorancia que, por familiares o cercanos, han podido adquirir una forma de invisibilidad.

El motivo de escribirle ahora, señora portavoz, es pedirle que comente unas declaraciones que efectuó recientemente en las cuales afirma que la información disponible sobre el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 es suficiente e interesante. Con estas declaraciones se desmarcaba usted de la posición del vicepresidente segundo del gobierno, que reclama que se abran los archivos para que los españoles puedan tener acceso a la totalidad de las informaciones disponibles sobre el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981.

Es sin duda inhabitual que un ministro de un país democrático declare públicamente que la información disponible sobre acontecimientos históricos fundamentales es suficiente. Suscita extrañeza, asimismo, que añada usted un segundo criterio, recurriendo al adjetivo interesante, como si quisiese significar que la información ha de buscarse hasta que sea interesante y que, una vez establecido el “interés”, ya no hubiese lugar a que se prolongaren las indagaciones.

¿Tendría usted a bien, señora portavoz, ampliar y profundizar su posición?

Incluyo en el dossier que preparo el famoso relato de J. L. Borges Pierre Menard, autor del Quijote. En él, se interpreta de manera jocosa y sorprendente aquellas famosas palabras del Quijote, la verdad, madre de la historia :

La historia, madre de la verdad; la idea es asombrosa. Menard, contemporáneo de William James, no define la historia como una indagación de la realidad sino como su origen. La verdad histórica, para él, no es lo que sucedió; es lo que juzgamos que sucedió. Las cláusulas finales —ejemplo y aviso de lo presente, advertencia de lo por venir— son descaradamente pragmáticas.

Pierre Menard, autor del Quijote.

¿Haría usted suya esta manera de ver la historia? ¿Defiende usted una visión pragmática de dicha disciplina? ¿Piensa usted que es legítimo no poner a la disposición del pueblo español ciertas informaciones si las mismas tuvieren por efecto debilitar su confianza en las instituciones del Estado, en la de la Monarquía, en particular? ¿Piensa usted que si la información de que disponemos es suficiente para que el golpe de Estado no se vuelva a repetir, ya no es oportuno buscar o facilitar más información?1

El gobierno se ha comprometido a reformar la ley franquista de secretos oficiales de 1968, que singulariza a España en el ámbito europeo y rige la comunicabilidad de la documentación oficial sobre el golpe de Estado del 23 de febrero. ¿Piensa usted que la futura ley deba someter la decisión de hacer pública documentación oficial al criterio de si la información ya existente es suficiente e/o interesante? En el supuesto de que tal sea su posición, o la del gobierno del que es portavoz, ¿cuál sería la autoridad que estimaría el carácter suficiente e/o interesante de la información disponible?

Transmito esta carta a diferentes departamentos de historia de universidades españolas para recabar su posición sobre los puntos evocados aquí.

La saluda atentamente,

Sebastián Nowenstein, professeur agrégé.

PS : En septiembre de 2018, le escribí a quien fuera su predecesora en la portavocía del gobierno, la señora Celaá, que había afirmado que las bombas que España vendía a Arabia Saudita no matarían a yemeníes por ser, las bombas, inteligentes. ¿Tendría usted a bien indicarme si la predicción que en su momento efectuara la portavoz ha resultado válida? ¿Ha efectuado el gobierno los controles que permitan determinarlo?

1Es esta una cuestión que viene de antaño y que ya Feijóo se formulaba: « Cuando yo, por más tortura que dé al discurso, no pueda pasar de una prudente duda, me la guardaré depositada en la mente y dejaré al pueblo en todas aquellas opiniones que entretienen su vanidad o fomentan su devoción. Sólo en caso que su vana creencia le pueda ser perjudicial, procuraré apearle de ella, mostrándole el motivo de la duda».