Traicionando a Borges, II. Del rigor en la ciencia

Traiciono a Borges y conculco sus textos. Mis alumnos no se dan cuenta de lo que hacen. Asumo todas las responsabilidades de lo que, bajo mi férula, se ha cometido en mi aula.

Esteban Nierenstein.

Clase I.

Profesor: Hoy preparamos una serie. Primero escribimos el guion y después lo interpretamos.

Profesor: Decidme todo lo que podáis del texto.

Mendara: Es un texto corto.

Eala mira el teléfono en lugar de participar en la clase.

El profesor, que es bastante mayor, se equivoca con los nombres de los estudiantes.

Eala: El título del texto es Del rigor en la ciencia.

Mendara: El texto es antiguo. Lo sé porque su fecha de publicación es 1658.

Naralia: No sé qué más decir. El autor del texto es Suárez Miranda.

Eala y Lisalda (peleándose por hablar): Es un fragmento del Libro Cuarto de un libro titulado Viajes de Varones Prudentes, publicado en Lérida.

Lisalda: Veo que aparece la palabra FIN. Me pregunto si se trata de un libro que contiene muchos artículos diferentes.

Eala: La palabra FIN indica el fin del texto.

Naralia: A mí me parece extraño que la palabra FIN aparezca después de la mención del título y del autor.

Maïssam: Estoy de acuerdo con la observación de Naralia.

Salta: (…)

Profesor: ¿Qué le pasa a Salta?

Sus amigas: Está enferma, muy enferma.

Profesor: Salta, ¿Te dejamos tranquila?

Salta: Sí, por favor.

Profesor: Diasaura, ¿te parece una buena idea?

Diasaura finge no entender que el profesor habla de que estaba sacando el teléfono.

Profesor: Antes de continuar, vamos a ensayar un poco.

Los alumnos leen lo que han escrito.

Eala: El texto habla del arte de la cartografía.

Lisalda: Se trata del mapa de un imperio.

Naralia y Lisalda: ¡No es posible crear un mapa que tenga el tamaño de todo un imperio!

Naralia y Eala: Entendemos que el mapa no perdura, que se destruye. En los restos del mapa viven animales y mendigos.

Profesor: Una pequeña aclaración: yo escribo lo que decís, lo que hubierais podido decir y, también, lo que no habéis dicho.

Clase II

Profesor: Vamos a realizar la actividad siguiente:

Trabajas en una empresa de compra y venta de antigüedades. Tu jefe te ha dicho que acaba de adquirir un fragmento de un mapa de escala 1/1 realizado en un imperio lejano. Tu jefe está particularmente satisfecho porque, al mismo tiempo, ha adquirido un libro que data de 1658 y que da cuenta de la existencia del mapa. Quien ha vendido el libro tiene por nombre Víctor Suárez Miranda y dice ser descendiente directo del autor del libro.

Por la tarde, tu primo te pide que lo ayudes con una tarea que tiene que hacer para la escuela y que toma apoyo en el texto que hemos estudiado. El profesor ha puesto en Pronote la totalidad de la clase. Entiendes que Suárez Miranda no existe, y que tampoco existe su libro.

Profesor: Tenéis que escribirle un mail a vuestro jefe…

Alumnos: No profesor, mejor un diálogo, una conversación.

Director: María, tienes algo que decirnos…

María: A ver, es un poco complicado…

Responsable RRHH: Te escuchamos, María.

María: Ayer tuve que ayudar a mi primo con los deberes de español.

Director: ¿Y?

María: No sé cómo decirlo…

Director: ¡Ánimo, María!

María: Creo que lo han estafado, director.

Director: ¿De qué estás hablando, mujer?

María: Suárez Miranda no existe.

RRHH: ¿Me podéis explicar de qué estáis hablando?

María: El director lo podrá explicar…

Director: No entiendo.

María: El director le ha comprado un libro y un mapa antiguo a cierto Suárez Miranda… que no existe.

La mesa se pone a vibrar.

Borges: Soy Borges, el autor del cuento Del rigor de la ciencia. María tiene razón. Yo inventé a Suárez Miranda. Su libro tampoco existe.

Director: ¿Qué es esto?

María: Alguien se ha hecho pasar por un descendiente de Suárez Miranda. El problema, como lo dice Borges, es que Suárez Miranda no existe.

Borges: Bueno, no es así de sencillo. Los muertos y los personajes de ficción a veces entran en el mundo real. No podemos excluir que Suárez Miranda se halla encarnado en un ser humano.

(Suena el teléfono)

Director (le tiembla la voz): Es…, es… Suárez Miranda.

SM: Soy VSM.

Naralia: Vamos a filmarnos.

Profesor: Podéis hacerlo, sois mayores.

La alumna se levanta y dispone el teléfono para que filme.